jueves, 16 de septiembre de 2010

Mi adiós a la Alhambra

Mis queridos, mis queridas, oh como suena esto último,  pues lo dicho, missssssssss , que Granada se acaba, bueno, aún me queda la tarde, aunque con la pinta que ha tomado este cielo, no se si es para no salir.
Me he levantado está mañana con la intención de irme a la Alhambra, hacía calor como todos los días, pero para mi sorpresa al salir del albergue el cielo estaba totalmente girs, podías percibir que algunas gotas querían llegar al suelo seco de este mes de septiembre. Valoré que el riesgo  de lluvia no era probable, así que tomé la guagua sin pensarlo mucho.
Llevaba en mente el ir a los jardines de la Alhambra y escuchar allí una música que portó en mi mp3, bueno también podía haber sido en mi mp4, pero no aún estoy en lo básico.
Nada más llegar a la cuesta y haber recorrido los primeros 100 metros, me puse los cascos, me senté justo en una puerta vieja de la Alhambra, está metida en el jardín así que tienes que mirar con atención.
Contemplé una y otra vez dichos restos, y no pude resistir la belleza de la arquitectura y la música. Es muy probable que todo lo que nos han contado de la Alhambra sean verdades a medias, puede que en aquel lugar de paz, hayan muerto cientos de personas, y las conspiraciones se hayan sucedido a diario. Pero lo que si es cierto, es que hoy en día aquello es un lugar para la paz, para proteger, guardar y querer.
Me despido de la Alhambra con unos sonidos que invaden toda la puerta de acceso, me apresuro a reconocer al músico, pero lo que me extraña realmente es su instrumento. Creo que no esperaba mejor despedida, mejor regalo que llevarme, así que colaboré para que este tipo de creadores, de músicos sigan existiendo.
De repente caen más chispas y el cielo amenaza en serio ,así que decido salir por piernas y coger la guagua hasta el albergue.
Una cosa que me ha sorprendido de ver estos días precisamente viajando en la guagua es el grado de violencia que lleva la gente, no solo lo he vivido de cerca sino que hoy me ha intentado rozar, pero me niego a cerrar este capitulo porque 4 desgraciados sigan viviendo aún de espaldas  a la Alhambra,  prefiero terminar diciendo que lo contrario del pobre Boabdil que marchó triste y desarmado, yo he sido Feliz en Granada, besos colegas,  ayyyyyyyyy lo bien que hubiéramos instalados en estos jardines nuestra pequeña secta,  besos, toca hacer la maleta.



El autor con un instrumento creado hace 10 años, Suiza



La Puerta del  vino, dicen que ahí estuvo colgado muerto un personaje castellano



Bueno desde aquí les despido al más puro estilo de Carlos, saliendo en todas las fotos












Desde la puerta les despido de Granada



Les dejo el camino para que puedan reconocerlo y dar los primeros pasos.

1 comentario:

  1. No es cierto. En el auténtico estilo mío habrías salido guapo. Como poco, resultón.

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